De la relación entre el Amor y el Matrimonio:
El amor es un sentimiento generado de la naturaleza e idealizada por el hombre. El matrimonio, por otro lado, es una realidad creada por la arbitrariedad del hombre, el cual se somete, voluntariamente, por presión o por interés. (ver los otros 2 post relacionados)
Esta arbitrariedad, además, consagra en algunos casos, normas que colisionan con la naturaleza del ser humano como animal, como por ejemplo la monogamia, que es una exigencia contraria a las leyes naturales y que por lo tanto genera un incentivo perverso para la infidelidad y una contribución con la monotonía y el aburrimiento, por lo que en consecuencia, se reducen las posibilidades alcanzar la felicidad conyugal.
Pero ambos, el amor y el matrimonio, por más dispares que sean, tienen ciertas características en común. Los dos se desarrollan con una poderosa perseverancia y deseo de superación constante. Se sustentan en varias cosas. Primero, en la amistad. El mejor amigo seguramente tendrá la mejor esposa. Aunque difiere de la amistad porque se trata de una que excluye al resto, pues uno no estará dispuesto a compartir al ser amado con los demás. Segundo, en la generosidad, porque siempre involucra la renuncia a algo personal. Tercero, paradójicamente también se sustenta en una suerte de egoísmo por los motivos de exclusión amical a los que hacíamos referencia. Cuarto, en la honestidad, pero con algunas excepciones como cuando el engaño es para prevenir el dolor ajeno. Quinto, en la comunicación, pero de manera limitada cuando uno tiene que engañar bajo los términos anteriores. Sexto, en la estimación, salvo en esos microsegundos durante las discusiones más feroces. Y finalmente, séptimo, en el respeto mutuo, con los limitantes impuestos por estas riñas.
Como se ve, el amor y el matrimonio son dos cosas muy difíciles de llevar bien. Tiene que conseguir el perfecto equilibrio entre los pesos negativos y los positivos, para que todo resulte de manera aceptable.
Muchas veces se cree que el matrimonio mata al amor, y esto puede ser cierto si se tiene como concepto de “amor” a la primera etapa a la que nos referíamos como “confusiones de lo que es amor” (vale decir, la ilusión). Pero si se maneja un concepto diferente, esto es, el que se genera después de esa etapa de confusión mental, el matrimonio puede ser la herramienta perfecta para consolidarlo, sobre todo si encuentra la manera de luchar contra la monotonía diaria y si se tiene el sustento moral de los hijos.
Lo que si es cierto en ambos casos, es que tanto el amor como el matrimonio son como el chocolate: primero te endulzan y luego te engordan… y no a todos les molesta estar un poco subidos de peso.
si me pidieran resumir el matrimonio en una palabra escogería: COMPROMISO. TU?
ResponderEliminarEstoy de acuerdo, siempre que la palabra "COMPROMISO" incluya (entre otras cosas) el concepto de "RESPETO"...
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